Los Diablos del SED
- Andy Rodríguez
- 30 abr 2018
- 4 Min. de lectura
Los festivales siempre han sido lugares donde puedo ser yo mismo, liberarme y sobre todo sacar los diablos. La tercera edición del Saca el Diablo de ayer, 28 de abril no fue la excepción, por el impresionante cartel que se presentó incluyendo bandas que realmente son parte de mi vida cotidiana como Nicola Cruz, El Viejo Hombre de los Andres (EVHA), Juana Molina y Bomba Estéreo.
El festival comenzó desde la mañana con asombrosas bandas, así que estuve temprano en Cumbayá, al ingresar a la quinta San Luis de Lumbisí me encontré con un trabajo logístico excelente, no tuve ninguna clase de problema, lo único que nos molestó fue la constante lluvia durante las primeras horas del festival, pero igual, al entrar al festival me encontré con un mundo diferente, lleno de color, paz y música de una asombrosa calidad, logré escuchar algunas canciones de Skanka Fe y saltar a un pequeño pogo con las personas que llegaron para escucharlos sin importar la humedad del pasto y el miedo de resbalar.
Con el pasar de las horas escuché la explosividad de La Madre Tirana y Fat Chancho todavía acompañado de una incesante lluvia que parecía iba a estar todo el día, hasta que llego la hora de Pichirilo Radioactivo en el escenario “Saca Todo” y de manera repentina las nubes se fueron y el sol salió con toda su fuerza a llenarnos al igual que el Pichirilo de la mano de su potente Ska.
Las horas pasaban y cada minuto era mejor que otro, mirabas a tu alrededor y disfrutabas cada momento, cada lugar dentro del festival estaba perfectamente ubicado, todo encajaba, la comida, las cervezas artesanales, la zona de artesanías, los artistas creando arte en vivo se mezclaban con la música y formaban un equilibrio perfecto. Las horas pasaban y pasaban, en ambos escenarios había pogos, bailes, emociones y conexiones entre el público y cada banda que subía, pero debido a la lluvia de la mañana la mayor parte del césped se convirtió en lodo, pero a nadie de nosotros nos importaba, por que eran más fuertes las ganas de pogear y bailar que las de preocuparnos por nuestra ropa, bandas como ‘38 que no juega’, ‘Curare’, ‘Los Corrientes’ y ‘EVHA’ fueron los dueños de los movimientos de todos durante toda la tarde.
Ya caía la noche y era el turno de La Máquina Camaleón en el escenario “Saca Todo”, pero una falla en la consola retraso todo el show durante una hora aproximadamente, pero cuando empezó a tocar LMC sin antes invitar a La Madre Tirana a su set para tocar Alferecía y ver a Rodrigo, guitarrista de LMC cortar el cabello de Felipe, el vocalista, en un acto fugaz de locura que encendería el show, al ver esto supe que iba a ser un excelente show, pero simultáneamente en el escenario “Prende Todo” Nicola Cruz había empezado con su set, era una difícil decisión por que Felipe y Nicola poseían sonidos brutales, pero me incliné por ir al show de Nicola y no me arrepiento, por que el nos hizo vibrar a muchísimos con sus potentes sonidos ancestrales, mezclados todos en su consola, acompañado de unos asombrosos visuales que volaron las cabezas de todos los presentes.
Conforme las horas pasaban la tercera edición de Saca El Diablo se iba acabando, quedaban tres bandas: Swing Original Monks, la argentina Juana Molina, y la aclamada banda colombiana Bomba Estéreo. El cansancio empezaba a sentirse, no solo en mi si no en la mayoría de público que estuvo desde la mañana y esperaba con ansias a las bandas restantes.
Lo único que podíamos hacer era seguir de pie, doblar las piernas y seguir cantando y bailando. El show de Los Monks fue inigualable, dándonos la misma explosividad y felicidad por la que se caracterizan, pero nos habían preparado una grandiosa sorpresa, llamando a nadie más que Mateo Kingman para cantar juntos ‘Tucán’, con frases realmente profundas y llenas de sentimiento, dándole el broche de oro al show de ‘Los Monks’. Después de esa descarga de baile se presentaba la gran Juana Molina en el escenario “Prende Todo”, llamando la atención del público y de artistas que idolatran su abstracta pero hermosa música, canciones como Cosoco y Paraguaya hicieron bailar y destruir las mentes de muchos.
Ya eran eso de las diez de la noche, solo faltaba el show más esperado, todo el mundo fue al escenario principal para ver a Bomba Estéreo, la quinta estaba repleta, todos estaban emocionado y cansados, pero la energía que intercambiamos con Li Saumet fue increíble, poniéndonos a saltar durante 120 minutos, con canciones como Soy Yo, Duele, Fuego, Alma y Cuerpo y Somos Dos.
La potencia de todas las bandas que se presentaron en la tercera edición de Saca El Diablo lo convirtieron en un festival de primer nivel y especialmente inolvidable por toda la magia que nos brindaron a una grandiosa cantidad de personas amantes de la música independiente, estoy totalmente seguro que las próximas ediciones de este magnifico festival superarán a esta, pero por el momento, la tercera Edición de Saca El Diablo encabeza la lista de los mejores festivales en lo que va del año.
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